LA RABIA Y LAS HERIDAS DEL PASADO

La rabia es una reacción ante una frustración, algo que sucede y que no queríamos que hubiera salido así, una situación que podemos considerar como una injusticia. Esta reacción, que generalmente es agresiva y que puede impactar hacia uno mismo o hacia los demás, esconde un gran dolor, independientemente de que tengamos constancia de ello o no.

“La rabia se puede expulsar escogiendo pensamientos y emociones que nos favorezcan y conociendo las causas que la provocan”.

En la mayoría de los casos proviene de heridas del pasado, heridas o traumas que se produjeron en la etapa infantil y/o adolescente, que no han sido aceptadas, sanadas y soltadas, y que a día de hoy nos esclavizan afectando la relación con nosotros mismos o con el mundo que nos rodea. Entonces, cuando en el presente nos encontramos con un hecho similar o igual al que vivimos dolorosamente en el pasado desencadena en nosotros un estallido de locura.

Sus consecuencias son desastrosas… destruyen la autoestima, rompe las relaciones sociales y provocan enfermedades físicas y psicológicas. Es necesario emprender un recorrido de introspección para sanar tu pasado y despojarte y liberarte de todo aquello que te impide alcanzar tu amor y felicidad.

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